• La eliminación de desperdicios en todas las áreas de operación es un principio fundamental.
  • Promover la mejora continua y el control de calidad en cada etapa del proceso de producción.
  • La capacidad de una empresa para adaptarse rápidamente a los cambios es crucial.
  • Cumplir con las expectativas del cliente de manera confiable es una ventaja competitiva significativa.